Ficha de contenido

Don Francisco de Cárdenas, natural de México, vecino del pueblo de Tequaltichi, jurisdicción de Guadalajara, hijo legítimo de don Francisco de la Cueva y Cárdenas, vecino de la ciudad de Nuestra Señora de los Zacatecas y de doña Jerónima de Soto Villamisar, difunta, nieto por vía materna de don Jerónimo de Soto, tesorero general que fue de la Santa Cruzada de la Nueva España y de doña María de Villamisar, difuntos, como único y universal heredero que es de doña Jerónima Soto de Villamisar, su madre, cuya herencia acepta con beneficio de inventario y protestación de no confundir sus derechos, otorga su poder cumplido al capitán don Agustín de Castro Guzmán, su tío y a don Diego de Negrón, su primo, vecinos, para que sigan y fenezcan el pleito que en nombre de su madre y demás herederos de sus abuelos se sigue en el tribunal de la Santa Cruzada contra los bienes del secretario Pedro de la Torre, difunto, tesorero general que lo fue también de la Santa Cruzada, sobre los quinientos y tantos mil pesos de escrituras y recaudos que entraron en su poder pertenecientes a sus abuelos, que está remitido a cuentas. Para que ante cualesquier jueces y justicias eclesiásticas y seculares que con derecho deban, demanden y defiendan, hagan pedimentos y todo lo necesario y reciban y cobren todo lo que resultare pertenecerle y hagan todas las diligencias necesarias hasta la definitiva conclusión del pleito y tasación de costas. Y para que en su nombre, como universal heredero de doña Jerónima de Soto Villamisar, su madre, hagan cualesquier conciertos, quitas y esperas que convengan por la cantidad y por el tiempo que les pareciere con don Pedro Cortés de la Torre, heredero del secretario Pedro de la Torre como con cualquier otra persona interesada o que pretenda derecho a sus bienes. Firmó. Testigos: Melchor de los Reyes, Diego de Mendieta y Luis de Villagra, vecinos. [Al margen: "sin derechos, doy fe".] [En papel sellado.]