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Catalina de Guzmán, mulata libre, soltera, como madre de Joseph de Rosales, mulato, su hijo de 10 años de edad -ante el capitán don Gregorio López de Mendizabal, alcalde ordinario- dijo que quería poner a servicio por 2 años con Sebastián del Castillo, maestro de cirujano, a su hijo. Y para poder otorgar escritura el alcalde le nombró por su curador ad litem a Jerónimo de Marchena, procurador de la audiencia ordinaria, quien puso al menor a servicio con Sebastián del Castillo por tiempo de 2 años que corren y se cuentan desde hoy día de la fecha, dentro de los cuales le ha de dar de comer, vestir, hacerle buen tratamiento y enseñarle la doctrina cristiana, curarle en sus enfermedades como no pasen de 15 días y de salario cada mes 12 reales, los cuales se le han de dar a doña Catalina de Guzmán, su madre. El curador obligó al menor a que no se irá ni ausentará de la casa y servicio so pena de ser traído y compelido a que cumpla. Firmaron: don Gregorio López de Mendizabal, alcalde, Jerónimo de Marchena, curador y Sebastián del Castillo, maestro. Testigos: Diego de Mendieta, Luis de Villagra y Melchor de los Reyes, vecinos. [Al margen: "sin derechos, doy fe".] [En papel sellado.]