Ficha de contenido

Francisco Bullón, mayordomo del convento de Nuestra Señora de Regina Celi de México, en virtud del poder que tiene de las madres abadesas y definidoras -que pasó ante Juan Pérez de Rivera, escribano público el 15 de mayo de 1652 y es bastante para arrendamientos-, arrienda a Mariana de Alarcón, viuda de Pedro de Acuña, una casita de dos aposentos, que es en la calle que llaman de Toledo -que linda con casas de Simón de Haro-, por tiempo de dos años que han de empezar a correr desde el 1 de agosto de 1652, en precio de 60 pesos, por año, que ha de pagar en reales por sus meses adelantados, 5 pesos al principio de cada mes. Con condición de no poderla traspasar, ni hacerle aderezos ni reparos si no fuere con consentimiento, so pena de ser en sí ninguno y los reparos a su cuenta y riesgo, quedándose por mejoras de ella y sin que por ello se le pague cosa alguna. Y si más tiempo de los dos años viviere sin nuevo arrendamiento ha de pagar a razón de los 60 pesos. Firmó: Francisco Bullón; Mariana de Alarcón no firmó. Testigos: el bachiller Manuel de la Reguera, presbítero, Nicolás de Mendieta y Marcos Pacheco de Figueroa, vecinos. [Al margen: "derechos, 3 reales, no más, doy fe".] [En papel sellado.]