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Fray Juan de Zavala, procurador general del convento de Nuestra Señora de la Merced, redención de cautivos, de la ciudad de México -en virtud del poder que tiene de los padres, comendador y religiosos conventuales, que pasó ante Francisco Flores, escribano real, el 10 de enero de 1644, (VER ANEXO) vende al licenciado Francisco Pérez Centeno, beneficiado del partido de Zontecomatlán, un mulato llamado Joseph, criollo, de edad de 22 años, herrado en el rostro con esclavo, el cual quedó por fin y muerte del padre fray Baltasar Pérez, religioso de la orden, de quien lo heredó el convento. Lo vende por esclavo cautivo, sujeto a servidumbre, libre de empeño e hipoteca y otra enajenación, sin asegurarlo de ningún vicio, tacha ni enfermedad pública ni secreta, en precio de 380 pesos de oro común, que por él le da y paga en reales de contado por manos de Juan de Vertiz Santisteban, vecino, de lo que da fe Juan Pérez de Rivera, escribano público. Juan de Vértiz Santisteban en nombre del licenciado Francisco Pérez Centeno y en virtud del poder que tiene, acepta la escritura, declara que está en su poder el esclavo y tiene recibidos los títulos de el en 4 fojas. Firmaron. Testigos: Diego de Figueroa, Martín de Aguirre y Miguel Martín de la Horta, vecinos. [Al margen: "derechos, 4 reales".] [En papel sellado.]