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Francisco de la Cruz, mestizo, huérfano de padre y madre, de 12 años de edad, ante el tesorero Juan de Alcocer, regidor y alcalde ordinario de México, dijo querer entrar a servicio y por aprendiz del oficio de sastre con Nicolás de Lora, maestro, por tiempo de 4 años y medio. Y para poder otorgar escritura el alcalde le nombró por su curador ad litem a Francisco de León Figueroa, escribano real, vecino, quien puso al menor a servicio y por aprendiz por tiempo de 4 años y medio que han de comenzar a correr desde hoy día de la fecha, durante los cuales el maestro le ha de enseñar el oficio, le ha de dar de comer, vestir, curarle en sus enfermedades como no pasen de 15 días y al fin del tiempo un vestido entero, calzón, ropilla, capote, medias, zapatos, sombrero, camisas y darle por oficial, so pena que a costa del maestro lo acabe de aprender con otro y le ha de pagar lo que gana un oficial. Y el curador obligó al menor a que no se irá ni ausentará de la casa y servicio so pena de ser traído y compelido a que cumpla. El alcalde, Nicolás de Lora firmaron. Testigos: Diego de Figueroa, Diego de Acosta e Hipólito Mote, vecinos. [Al margen: sin derechos, doy fe.] [En papel sellado.]